"These days there’s so much paper to fill, or digital paper to fill, that whoever writes the first few things gets cut and pasted. Whoever gets their opinion in first has all that power". Thom Yorke

"Leer es cubrirse la cara, pensé. Leer es cubrirse la cara. Y escribir es mostrarla." Alejandro Zambra

"Ser joven no significa sólo tener pocos años, sino sentir más de la cuenta, sentir tanto que crees que vas a explotar."Alberto Fuguet

"Para impresionar a las chicas de los 70 tuve que leer a Freud, Althusser, Gramsci, Neruda y Carpentier antes de llegar a los 18. Para seducir a las chicas de los 70 me hice especialista en Borges, Tolstoi, Nietzsche y Mircea Elíade sin haber cumplido los 21. Menos mal que ninguna me hizo caso porque entonces hoy sería un ignorante". Fernando Iwasaki


miércoles, 4 de mayo de 2022

[Reseña] ‘El mundo en vilo. La ilusión tras la Gran Guerra’

'Un aleteo al fin de la guerra¨

Turner, 2020. 288 pp.



El ‘efecto mariposa’ es un término que se popularizó a raíz de una película de inicios de este siglo. Sin embargo, la idea ha inspirado, desde mucho antes, a autores como Ray Bradbury y hasta un episodio de los Simpsons. Incluso, esta idea fue llevada a inspirar a científicos, como sucedió con los múltiples pronósticos del tiempo del meteorólogo Edward Lorenz al intentar diseñar un modelo certero de predicción de fenómenos climáticos en 1961[1]. Cambios numéricos que –aunque diminutos y casi imperceptibles– podían tener efectos monumentales y ser capaces de provocar una sensación generalizada de caos debido a la a falta de predictibilidad. Este concepto de sistemas inestables que bien podría aplicar a lo que expone el libro de Daniel Schonpflug, quien, partiendo de datos históricos, recrea la indefensión generalizada en distintas partes del Hemisferio Norte tras el fin de la Primera Guerra Mundial.

¿Es posible aprehender toda la devastación emocional que involucra  la posguerra? ¿Qué supone la vida tras sobrevivir la batalla? Schonpflug brinda un retrato del fin de la primera confrontación a gran escala de la mayoría de los países europeos y el acelerado posicionamiento de los Estados Unidos como potencia mundial a través de retazos biográficos de distintos personajes de dicha época: de Harry Truman a Virginia Woolf, pasando por Gandhi, Lawrence de Arabia, el príncipe Guillermo de Prusia, Terence McSwiney y otros menos conocidos, pero de participación significativa, como Soghomon Thelirian o Marina Yurlova.

‘El mundo en vilo’ es un libro que apela a la narración de las vidas de dichos personajes durante años que siguieron al cese de las armas a fines de 1918. Schonpflug combina datos históricos con la exploración del mundo interior de sus protagonistas frente a estos hechos, ya sea mediante la revisión de las notas de sus diarios o una nutrida serie de libros biográficos[2], con el propósito de ilustrar ese estado de aturdimiento que cundió por los países europeos y las sociedades colonizadas por estos. Un estado de optimismo forzado (y finalmente erosionado) tras un furor de violencia que hizo que millones de hombres se enfrentaran a la muerte por la ambición de sus líderes. ¿Se podía aspirar a un momento de paz y calma en 1919?¿El hombre sería ya consciente de lo que podía provocar la falta de entendimiento y conciliación?

“’Eran años locos’: así resume Grosz la posguerra en Berlín. Tras la guerra, parecía como si todas las ataduras hubieran desaparecido. ‘Una oleada de vicio de pornografía y prostitución recorría el país entero. Todos decían ‘Je m’en fous, por fin ha llegado el momento de divertirse un poco’. En realidad, los tiempos son agotadores y nada divertidos’. Lo único que parece animado es la espuma multicolor de la vida nocturna y el arte, al menos superficialmente. Por debajo hambre destrucción y violencia’.” (pág. 155)

Veinte años es la distancia temporal entre las dos Guerras Mundiales. ¿Por qué tan poco tiempo? Hay muchos factores implicados, pero ‘El mundo en vilo’ se centra en el inicio de este lapso, con la fragilidad de los acuerdos de paz, la humillación a los vencidos y el desorden político de los vencedores. ¿Para qué sirvió el triunfo? ¿Hubo mayor bienestar? ¿Qué futuro se vislumbraba? Hay dos fragmentos del libro que ilustran una posible respuesta a dichas cavilaciones:

 

'Flamingo' (1917) de Curt Hermann



“(…) parece como si en la pintura se desvaneciese la esperanza de una victoria gloriosa y también la belle époque, anunciando el crepúsculo del Viejo Mundo, de las viejas élites y su época de esplendor. La muerte de una criatura bella simboliza, más allá de su contexto histórico concreto, el fracaso de algo magnífico, algo bello pero demasiado frágil para resistir a la cruda realidad. Ese fue el destino que la primavera y el verano de 1919 reservaba a las quimeras de tantos”. (pág. 176)

 

Finalmente, una de las mayores virtudes de ‘El mundo en vilo’ es la mención de los efectos de la guerra europea en las sociedades de la India, Siria, Arabia o Vietnam. El fuego de los anhelos de independencia que empezó a encenderse y no se ha extinguido hasta nuestros días. La interdependencia global es uno de los mayores símbolos de la modernidad, donde los aleteos de una mariposa en cualquier lugar del mundo provoca tempestades al otro lado del orbe. El actual conflicto de Ucrania y Rusia es un ejemplo más. ‘Los recuerdos, gracias a Dios, no pueden fotografiarse’, se cita hacia el final, y tal vez esté ahí la clave para que la humanidad siga aprendiendo, entre tanto sacudón violento, a convivir algún día en paz. A descifrar la subjetividad tras los hechos.



[2] Véase la Bibliografía del libro. Págs. 277-286